Porque son unas de las criaturas que suelen estar presentes en este juego y que cuentan con algunos fragmentos necesarios, en este sentido se hace necesario considerar que, los Pixies no están dispuestos a desprenderse de 3 de ellos solo que no necesariamente estas suelen estar dispuestos a desprenderse de ellos y en este sentido, se hace necesario embarcarnos en un trabajo que implica conocer Cómo destruir los santuarios de las hadas, esto debido a que las hadas emanan una luz brillante que suele asustar a los Pixies y es allí donde entramos nosotros.
Surge necesario encargarnos de realizar una búsqueda donde suele ser necesario considerar que debemos encargarnos de neutralizar al hada o las hadas, luego debemos interactuar con el santuario con el objeto de destruirlo, en este sentido, se hace necesario ubicar los respectivos santuarios, para nuestra buena suerte estos no suelen contar con un respectivo orden para destruirles.
Surge necesario eliminar a la dríada que está cerca para ello debemos considerar contar con una caja de cenizas, puede ser fabricado con:
Debemos encargarnos de equipar el cenicero y aguardar a que la dríade se acerque para proceder a encenderlo.
Saber Cómo destruir los santuarios de las hadas nos lleva a lidiar con un perro bastante agresivo que suele encontrarse patrullando por la zona y encargarnos de sedarlo, para ello debemos contar con un Bocado Soporífero, este puede fabricarse con:
Surge necesario lanzar el bocado soporífero en dirección al perro y este buscara comérselo lo cual hace que este se quede dormido.
Para cerrar esta búsqueda debemos encargarnos de distraer a los Goblins que suelen estar rodeando en santuario en Wytchwood, solo que para ello se hace necesario encargarnos de conseguir un Dreadful Doll, esta suele fabricarse con:
Una vez equipada la muñeca debemos lanzarla a nuestros pies con el objeto de generar un aura que suele paralizar de miedo a los goblins que puedan encontrarse cerca, con ello culminamos la destrucción de los santuarios de las hadas, solo restara retornar al árbol de las hadas con el objeto de conseguir que las mismas puedan darnos el fragmento del espejo.