Las tareas aquí sencillamente suelen darse con regularidad y
conseguir este trabajo es sencillamente fabuloso, pues nos ofrece la
posibilidad de hacernos con un pincel y mucha imaginación con límite, con ello
conseguimos realizar algunos saboteos a los oponentes con el objeto de tan solo
perturbarlos, este trabajo sin duda alguna es genial y elegante, además viene
para hacernos pasar un buen rato mientras progresamos en el juego a punto de
finalizar el segundo capítulo.
Este es el último trabajo del capítulo 2 y lo conseguimos en
Wiswald, pues aquí conseguiremos algunas pinturas algo extrañas donde es posible
develar quien está detrás de ello y es nuestro trabajo enfocarnos en hallar al
responsable, el detalle es que es tan solo una chica pequeña, la niña Folie a
quien debemos enfrentar para conseguir el trabajo ahora que ya hemos conseguido
devolver a todos su ser normal. Ahora bien, para enfrentarnos a la pequeña es necesario
atravesar el pasillo chico con el objeto de llegar a la cueva en el interior de
Wiswald.
Folie es la cuarta jefa de este capítulo y suele hacer obras de arte bien aterradoras, con ello comprenderás que la lucha no sea sencilla, sin embargo se logra llevar a cabo para tomar el trabajo y utilizarlo con el simple objeto de molestar a los enemigos, con este se nos permite: